¿Son las entregas día siguiente, sostenibles?
Autor: ExpokNews
Fecha de publicación del libro: 11 mayo 2022
Para más información:¿Son entregas día siguiente, sostenibles? (expoknews.com)
Palabras claves: Comercio electrónico, Amazon, envíos, sostenibilidad, colaboradores.
El auge del comercio electrónico durante la pandemia simplificó los procesos comerciales y cambió los hábitos de compra de la población, por tanto las empresas se vieron forzadas a acelerar los tiempos de entrega , generando envíos inmediatos. Un ejemplo de ello, es el incremento del 44% en las ventas de la comercializadora Amazon, lo que representó una ganancia de 8.100 millones de dólares. Lo anterior causado por el aumento en el volumen de pedidos por parte de los suscriptores del servicio de comercio electrónico que consideraban como salvavidas las entregas rápidas. Por otro lado, la cantidad de trabajo que reciben los repartidores y todos los integrantes de la cadena de logística generan desconfianza sobre si las entregas inmediatas son sostenibles, además de la gran cantidad de plástico y cartón que se utiliza para empacar los productos.
En este sentido, los colaboradores trabajan a un ritmo extraordinario para llevar a cada hogar los 1.6 millones de paquetes al día que presenta Amazon. Cumplir la promesa de Amazon con sus clientes de entregas en cinco horas o a la mañana siguiente si realiza la compra antes de medianoche genera consecuencias en salud física y mental de los trabajadores. Por ejemplo, una encuesta de trabajadores en un almacén de Amazon en Long Island reveló que el 42% de los repartidores reportó dolor físico en los pies y espalda baja durante sus actividades diarias, además, del aumento de las presiones psicológicas y la cantidad de horas sin dormir. También, el personal de la compañía de comercio electrónico se ha visto involucrado en accidentes de tránsito en los vehículos dónde transportan los pedidos.
Por otro lado, algunos argumentan que el comercio electrónico está movilizando los automóviles que antes hacían viajes de rutina a los centros comerciales, para el comercio tradicional. Además, la compañía de Jeff Bezos ha anunciado reducir a cero las emisiones de carbono para el año 2040. Sin embargo, la cantidad de viajes necesarios para entregar las compras es demasiado alto y no garantiza la sostenibilidad de dicha actividad, porque utilizan medios de transporte más pequeños que los gigantes de 18 ruedas que transportan los productos a las empresas minoristas, generando así más emisiones de CO2.Por ello, algunas personas proponen el uso de vehículos con cero emisiones, para contribuir a un futuro sostenible. No obstante, señala que la responsabilidad de esta actividad también recae sobre el consumidor, el cual debería ser más consciente a la hora de elegir un producto en el mercado, reflexionar si es verdaderamente necesario o solo un capricho.
Desde mi experiencia personal como comprador de productos por Internet puedo confirmar que el uso de papel, plástico y cartón que se utiliza para movilizar un producto desde la tienda virtual hasta la casa del consumidor es demasiado alto. Incluso, no es reutilizado dentro de la mayoría de los hogares, simplemente cumplieron la función de empacar el producto y después a la basura, generando más desechos sólidos en el ambiente. Sin embargo, algunas empresas, han desarrollado empaques sostenibles, los cuáles están desarrollados de fécula de maíz o con una descomposición más corta y amigable con el ambiente. Por ejemplo Mattelsa utiliza bolsas compostables, fabricadas por la empresa Uman Colombia, las cuales se pueden enterrar y después de un tiempo se convierten en abono orgánico de calidad.
En conclusión, los costos ambientales y sociales que tiene el comercio electrónico afecta considerablemente el medio ambiente y la calidad de vida de las personas que están dentro de la cadena de logística. Por ello, es de vital importancia tomar conciencia de las acciones diarias, principalmente de las compras que se realizan a diario, ya sea por internet o en una tienda de manera presencial, porque la mayoría de las veces se adquieren productos innecesarios para los hogares, sólo por el impulso de la moda o por los hábitos consumistas que el sistema capitalista ha implantado en la sociedad.